Eres tú

Es ella cómplice de esto que se va formando. Es la noche la que nos cubre y es mi culpa. Es el frío, es la lluvia. Son los árboles con su viento sur. Son nuestros cuerpos que se desean, los que centímetro a centímetro parecen necesitarse.
Es la edad que tuve y que no sostuve. La adolescencia esa que llaman y que no viví. Es el tiempo que no fue mio. Por eso digo que es mi culpa.
Porque es mi café perfecto cuando la luna nos alumbra. Mi sombra cuando sale el sol. Quien me sostiene cuando estoy a punto de caer, es mi equilibrio en mi torpe y desequilibrado cuerpo.
No me gustan sus manos. Son sus manos las que me gustan cuando me recorren. Son sus besos los que nunca probé que ahora me enloquecen. Su olor impregnado en cada partícula que lo conforma. El cuerpo que nunca soñé, es su cuerpo. Son sus brazos, su pecho y sus ojos. Sus pestañas. Son sus ojos.
Hay tanto que quiere contarme. Son sus palabras. Sus términos y su lenguaje que me descolocan. Son las historias familiares. Es la vida. Es la sonrisa y la palabra.
Eres tú.
Tú.

1 comentario:

Veju dijo...

cómplice...que palabra más inquietante, llamativa e interesante
Es la vida...