29 de mayo


Dicen que una herida te ha rozado el alma, que estás ahogado en un mar salado. Puede ser que todo ya acabó entre los dos, pero te grito que despiertes, que aún te amo. Las cosas no serán como antes, te lo puedo asegurar. Yo estoy aquí y tú allá, sólo nos queda un paso que ya he dado. Antes de olvidarme quisiera susurrarte que no me gustó el final. Y te quiero contar que la esencia de algunas historias es no modificarse con el paso del tiempo, hay otras, la nuestra, que acaban sólo para volver a empezar.
Quizás no estamos destinados para estar, sólo porque el destino no existe; y la casualidad del segundo exacto en que nos crucemos, aún no sucede.

Te he regalado el último soplo de mi corazón

PD: me quedaré aquí esperándote, inmóvil.

1 comentario:

Veju dijo...

fuertes y contradictorias palabras (snif)
el último soplo, suena a que ya no suspirará por él, pero aún así no le es pisible moverse u_u
Y qué imagen mas linda :)

El fututo lo construye uno po, el destino vendría siendo lo que no manejamos, los FACTORES EXTERNOS, que debemos sortear

te quiero